Caracas, 14 de mayo (IPYS Venezuela)-. La periodista Sebastiana Barráez fue señalada nuevamente por el fiscal general de la República, Tarek William Saab, en esta oportunidad de formar parte de una presunta “estructura mediática extorsiva” manejada por el ex vicepresidente sectorial de Economía y exministro de Petróleo, Tareck El Aissami, en la trama de corrupción de la industria petrolera denominada por el oficialismo como “PDVSA-Cripto”.
Saab informó en declaraciones televisadas el martes 7 de mayo que Barráez y los periodistas de Armando.info, Roberto Deniz y Ewald Scharfenberg, integraban una supuesta nómina paralela de la empresa estatal Petróleos de Venezuela, S.A. (PDVSA) para ejecutar “campañas de descrédito contra las autoridades legítimamente constituidas de Venezuela”, en la que también presuntamente participaban los comunicadores sociales Daniel Lara Farías y Maibort Petit y los creadores de contenido político y de opinión Norbey Marín y Wender Villalobos bajo la dirección de El Aissami.
El máximo fiscal sustentó sus declaraciones a partir de una confesión del empresario Samark López, acusado en 2017 por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos de ser testaferro de Tareck El Aissami, que está detenido desde el 9 de abril junto al exministro de Petróleo por presuntos delitos de corrupción.
Esta no es la primera vez que desde la Fiscalía General señalan a la periodista. El lunes 22 de enero desde el Ministerio Público, Saab emitió órdenes de aprehensión contra Barráez; la abogada y defensora de derechos humanos, Tamara Suju; los youtubers Wender Villalobos y Norbey Marin, y los militares retirados Mario Iván Carratú Molina y José Antonio Colina por presuntamente ser parte de la operación “Brazalete Blanco”, plan para atentar contra las vidas del presidente Nicolás Maduro y el gobernador del estado Táchira, Freddy Bernal.
A partir de una confesión del exmilitar Ányelo Heredia, que se desconoce si fue autónoma o bajo coacción, Saab imputó los delitos de traición a la patria, homicidio intencional calificado en grado de tentativa contra el presidente de la República y contra el gobernador del estado Táchira, terrorismo y asociación a Barráez, Suju, los creadores de contenido Villalobos y Marín y los militares retirados Carratú Molina y Colina.
En sus declaraciones, Heredia señaló que los comunicadores tenían como misión “difundir en las diferentes redes sociales todo lo que estaba sucediendo in situ” como parte de la supuesta trama conspirativa “Brazalete Blanco”, que tenía como objetivo tomar la 21° Brigada de Infantería del Ejército en el estado Táchira, atentar contra la integridad de Freddy Bernal y escalar el conflicto hasta afectar a Nicolás Maduro. Tarek William Saab señaló que tales eventos tenían previsto ejecutarse el 1 de enero de 2024 tras las festividades de Año Nuevo.
Heredia fue detenido el 14 de diciembre de 2023 cuando aparentemente se movilizaba en la frontera con Colombia en el estado Táchira, en compañía del también exmilitar Ronald Ojeda, quien pudo escapar hasta Chile donde posteriormente fue secuestrado y asesinado. Por la supuesta trama de magnicidio, también fue detenida la abogada y defensora de derechos humanos Rocío Sanmiguel, presidenta de la organización Control Ciudadano, el 9 de febrero cuando se disponía a tomar un vuelo junto a su hija hacia Miami, Estados Unidos.
En redes sociales Sebastiana Barráez también ha sido atacada y se han implementado campañas de hostigamiento y desinformación en su contra por parte de funcionarios estatales y simpatizantes oficialistas.
Tras los más recientes señalamientos desde la Fiscalía, funcionarios como el vicepresidente de Comunicación, Cultura y Turismo y ministro de Comunicación e Información, Freddy Ñáñez; Pedro Infante, primer vicepresidente de la Asamblea Nacional; Marío Silva, diputado por el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV); Camilla Fabri Saab, esposa de Alex Saab y otros, difundieron a través de X e Instagram la imagen publicada inicialmente por Tarek William Saab en transmisión nacional, en la que aparece Sebastiana Barráez como parte de la supuesta trama “PDVSA-Cripto”. A partir de tales publicaciones, simpatizantes del chavismo comenzaron a usar la etiqueta “#PalangristasDeElAissami” para atacar a la reportera y al resto de los comunicadores.
En las publicaciones fueron recurrentes los señalamientos de “palangristas”, “extorsionadores” y “delincuentes”. En medio de esta campaña también se vio afectado el director de la organización Cazadores de Fake News (CFN), Adrián González, a quien señalaron de usar el observatorio, que monitorea la desinformación en red, de fabricar mentiras y ejercer el “terrorismo digital”.
En paralelo, las cuentas en redes sociales del programa de televisión “Con el mazo dando”, transmitido por el canal del Estado VTV, y dirigido por Diosdado Cabello, diputado a la Asamblea Nacional y primer vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), difundieron imágenes generadas por inteligencia artificial de figuras de roedores con los nombres de medios de comunicación digitales, comunicadores y periodistas, incluida Sebastiana Barráez.
Asimismo, a través del programa “Lo que nadie te cuenta” del portal pro oficial Venezuela News, caracterizado por manipular información, la periodista Emma Carolina Agurto señaló a Barráez, Daniel Lara Farías y Maibort Petit de ser pseudoperiodistas y acusó a los portales Armando.info y Punto de Corte de ser “lavadoras de dinero”. En la pieza audiovisual difundida a través de redes sociales, Agurto también atacó a Roberto Deniz y lo señaló de ser parte de una presunta red de extorsión dirigida por Tareck El Aissami.
Los señalamientos contra Barráez han sido continuos desde las más altas figuras del gobierno venezolano. El 28 de marzo, el ministro Freddy Ñáñez atacó a la periodista a través de su cuenta en X luego de que ella desmintiera los señalamientos del fiscal general sobre Jerry Ostos, acusado del presunto magnicidio frustrado contra Nicolás Maduro en la plaza Diego Ibarra el 25 de marzo. Saab señaló que las personas detenidas en ese momento pertenecían al partido Vente Venezuela de la líder María Corina Machado, y Barráez objetó tales declaraciones con evidencias digitales del activismo de Ostos en el partido de gobierno. Tal publicación desencadenó que Ñáñez criminalizara a la periodista y la vinculara con el paramilitarismo colombiano.
De forma reiterada, Ñáñez realizó publicaciones hostigando a la comunicadora y la señaló de manipular narrativas de mentiras, obstruir una aparente investigación y evadir la justicia. Además, señaló que la reportera cuenta con alerta roja de Interpol. Sin embargo, luego de una revisión en la página oficial de la policía internacional se pudo comprobar que tal solicitud no existe.
Tras los ataques del ministro de Comunicación, en redes sociales se ejecutó una campaña de descrédito y el posicionamiento de dos etiquetas contra la periodista: “#SebastianaMiente” y “#SebastianaParaca” promovida por simpatizantes oficialistas. Estos eventos se suman a otras campañas documentadas en años anteriores por Cazadores de Fake News en las que destacaron las etiquetas “#PalangristaApátrida” y “#LaFANBSeRespetan”.
La cuenta en X del programa “Con el mazo dando” publicó el mismo 28 de marzo una imagen manipulada con el diseño del Seguro Social Venezolano con información de la periodista, en la que señalan que Barráez trabaja para el paramilitarismo en una supuesta empresa llamada “Paraco anónimos C.A.”, además, tildaron a la reportera de “palangrista” y “alias La Paraquita”. Diosdado Cabello se ha referido de esta forma en varias oportunidades contra la comunicadora social en su programa de televisión.
A través del programa “Con Maduro +” transmitido el 1 de abril, Nicolás Maduro también arremetió contra Barráez y la señaló de prófuga de la justicia venezolana y de crear una historia falsa sobre el vínculo de Ostos con Diosdado Cabello. Pero en su artículo, la reportera de Infobae no dijo que Ostos tuviera conexión con Diosdado Cabello, sino con su hermano, José David Cabello.
Entre enero y el 13 de mayo de 2024, IPYS Venezuela documentó siete casos en los que Sebastiana Barráez ha sido criminalizada, señalada y hostigada por funcionarios del Estado venezolano y simpatizantes oficialistas. En su contra se han implementado acusaciones, acciones judiciales y campañas de descrédito y desinformación que evidencian una persecución sostenida para afectar su trabajo como periodista especializada en la fuente militar. Esta organización condena los ataques prolongados contra Barráez y exige al Estado el cese de la persecución y el uso de los mecanismos judiciales para amedrentar a la prensa.