Caracas, 12 de julio (IPYS Venezuela)-. Tres funcionarios de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel), en compañía de efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), cerraron la emisora Deportiva 98.3 FM en Valle de la Pascua, estado Guárico, la noche del jueves 4 de julio.
Tras un procedimiento que se extendió entre las 03:00 p.m. y las 8:00 p.m., cuando les fue entregada el acta del procedimiento, el ente alegó la falta de permisos. Asimismo, confiscaron el transmisor (de 200 vatios), una consola, un CPU, dos micrófonos, un teclado y un mouse.
El director de la emisora, Vladimir Balza, contó a IPYS Venezuela que solicitaron la habilitación a la Conatel en dos oportunidades, en 2006 y en 2017, pero no obtuvieron respuesta. Hasta 2021 fueron consecuentes con el pago de los trimestres, pero ese año la Comisión les informó que no podían seguir pagando los tributos hasta que tuvieran los permisos al día, pero los mismos nunca fueron otorgados.
En el acta de incautación, la Comisión alegó que la directiva de la emisora cuenta con 15 días para apelar la medida. Balza dijo a IPYS Venezuela que tras evaluar con su equipo de abogados, recurrirán a la Conatel para que revierta la decisión y les devuelvan los equipos.
Deportiva 98.3 FM salió al aire en 2006 y recientemente cumplió 18 años de transmisiones ininterrumpidas. Su parrilla de programación estuvo compuesta principalmente de programas de entretenimiento, información y opinión. El dial formaba parte de la red de emisoras de FM Center y se conectaba a las transmisiones deportivas y los informativos del circuito.
Con este cierre, 18 personas quedan sin empleo entre locutores, productores, operadores y miembros administrativos. La estación era escuchada en los municipios Leonardo Infante (Valle de la Pascua), José Félix Ribas (Tucupido), El Socorro y Chaguaramas del estado Guárico. Esta es la segunda emisora cerrada en la entidad llanera en menos de un mes y la número 15 en el país durante 2024.
IPYS Venezuela condena el actuar arbitrario de la Conatel y su continua opacidad administrativa respecto al otorgamiento de habilitaciones y concesiones. Estas medidas arbitrarias incrementan los desiertos de noticias y vulneran cada vez más al ecosistema mediático tradicional.