Asesor especial del Ministro expone los datos del reportero de la revista Crusoe para intimidarle

Feb 1, 2021 | 0 Comentarios

Brasil, 01 de febrero de 2021 (Abraji). – El viernes de la semana pasada (29 de enero de 2021), el reportero André Spigariol de la Revista Crusoé comenzó a sufrir acoso online y doxing (exposición de datos personales en Internet) por parte del publicitario Marcos Eraldo Arnoud Marques, conocido como «Markinhos Show», asesor especial del Ministro de Salud, Eduardo Pazuello. 

Marques fue oficialmente encargado, el 20 de enero de 2021, de dirigir la estrategia de comunicación del Ministerio de Salud. Como es habitual en las investigaciones periodísticas, el reportero de Crusoé utilizó la información disponible en la página web del publicitario y en los cursos que dio para esbozar un perfil de quien comandaría un puesto estratégico dentro del gobierno federal. En este proceso, escuchó al entrevistado, otro principio básico del periodismo. 

Tras la publicación del reportaje, André Spigariol fue advertido por el propio publicitario de que publicaría las conversaciones intercambiadas entre ellos durante la investigación periodística. El asesor especial de Pazuello también dijo que investigaría el currículum del periodista.

El viernes, «Markinhos Show» publicó en Twitter una foto del reportero de Crusoé, calificándolo de «pobre e infeliz empleado». El sábado 30 de enero de 2021, esta vez utilizando su cuenta de Facebook, dio a conocer datos de la empresa que el reportero abrió para prestar servicios periodísticos. En el mismo post, el asesor del ministro dijo tener conocimiento de la existencia de «varias facturas» emitidas por Spigariol, información que sólo podía obtenerse a través de Hacienda, o de los clientes para los que el periodista prestaba servicios.

La premisa del periodismo es determinar si una persona contratada por el gobierno con recursos públicos tiene las calificaciones necesarias. En las democracias, suele ser la prensa la que realiza este escrutinio, no con el objetivo de destruir reputaciones, sino, sobre todo, para señalar posibles insuficiencias, inexactitudes y conflictos éticos. 

Según la Corte Suprema, la libertad de prensa incluye el pensamiento crítico y la función de supervisión. Así, forma parte del ejercicio del periodismo cuestionar a las autoridades, a los agentes del Estado o a terceros al servicio de los organismos públicos.

Para Abraji, todo ciudadano tiene derecho a quejarse de lo que considera tergiversado, o que no presenta el contexto necesario para una amplia comprensión de un asunto. Sin embargo, el acoso virtual y la exposición de los datos personales de los periodistas constituyen un grave intento de intimidación, especialmente cuando lo realiza un agente público.