¿Cuáles son los retos y amenazas del periodismo en Latinoamérica?

Feb 10, 2020

Latinoamérica es una de las regiones más peligrosas para ser periodista. Solo en enero de 2020, Voces del Sur (VDS) registró 38 agresiones en contra de la libertad de prensa en nueve países de la región. La mayoría de periodistas que sufrió agresiones en este lapso es de Nicaragua, Venezuela, Ecuador y Bolivia.

Adriana León, directora del área de Libertades del Instituto Prensa y Sociedad (IPYS) de Perú; Cesario Padilla, responsable del sistema de alertas del Comité por la Libre Expresión (C-Libre) de Honduras; y Marianela Balbi, directora ejecutiva del IPYS de Venezuela, analizaron los retos y amenazas principales del periodismo en el conversatorio en línea: El periodismo latinoamericano en contexto.

Aquí se recogen las reflexiones que surgieron en la conversación que se realizó el miércoles 5 de febrero, y que contó con la participación virtual de comunicadores, periodistas, estudiantes y académicos latinoamericanos. 

El agresor del periodismo latinoamericano está en el poder

“El principal agresor de los periodistas y de la prensa es el Estado; es decir, los funcionarios”, indicó la peruana Adriana León, del IPYS. Para la jefa del Área de Libertad de Prensa del Instituto, los servidores públicos utilizan a la justicia para callar al periodismo. Con los procesos judiciales, el Estado “afecta la economía del periodista y su estado de ánimo”, hecho que provoca la autocensura.

Con León coincide Cesario Padilla, de C-Libre de Honduras. “Desde el poder se criminaliza el ejercicio de la libertad de expresión y de prensa a través de la normativa”, explicó. Además del marco jurídico, asegura que la justicia deja en silencio e impunidad los crímenes en contra de los reporteros. En el país centroamericano la situación es preocupante. Solo en 2019 hubo ocho asesinatos a comunicadores. En los últimos 17 años, más de 80 hondureños fueron asesinados. 

Para Marianela Balbi, del IPYS de Venezuela, el hostigamiento a los periodistas y sus familiares, los procesos judiciales, el cierre de medios y la compra de empresas mediáticas para cambiar su línea editorial son algunos de los métodos que ha utilizado el régimen chavista. Balbi añade que desde los gobiernos hay la “construcción de un andamiaje legal para limitar la libertad de expresión”. Y ese modelo de control “se ha querido exportar a Nicaragua, a Ecuador, a Bolivia”.  

A los gobiernos latinoamericanos no les gusta el periodismo

La razón por la cual los gobernantes persiguen a los periodistas es “ocultar la corrupción”, dice León. Según el último Latinobarómetro de 2018 (una encuesta anual de opinión pública que observa el desarrollo de las democracias, economías y sociedades), los latinoamericanos consideran a la corrupción como el quinto problema más importante de la región. El primero es la delincuencia, de acuerdo a los resultados de la encuesta. 

En palabras de Padilla, “los gobernantes no gobiernan para la gente, para respetar los Derechos Humanos y las garantías de los ciudadanos”; por eso, “vigilan a la prensa que los cuestiona”. “Hay muchas mafias en Latinoamérica: trata, crimen organizado que ha entrado a los Gobiernos”, enfatiza la representante del IPYS Perú.

En Honduras “ha habido desapariciones y apresamiento a personas por cuestiones políticas. Y, cuando un periodista lo cuenta, se enfrenta a hostigamiento y vigilancia” comenta el hondureño. Entonces, como el periodismo expone esta realidad, los gobiernos persiguen. “El poder tiene miedo a ser investigado, a ser cuestionado”, explica Padilla.

Para los panelistas, el trabajo de Voces del Sur es necesario porque “si la sociedad no se da cuenta de la importancia del periodismo, no se puede defender la libertad de expresión”. Voces del Sur “nos hace entender que no estamos solos y que los ojos de las organizaciones que trabajan en la libertad de expresión están presentes”. 

El modelo político no es un factor aislado

“Los gobiernos autoritarios no conciben a su modelo político sin el control a la prensa”, argumenta Balbi. El modelo político que instaló Hugo Chávez (y que continúa Nicolás Maduro), en Venezuela, está unido a la necesidad de controlar los medios de comunicación y de construir una hegemonía comunicacional. 

La sociedad elige a caudillos que quieren perpetuarse en el poder. “Entonces, cambian las leyes, las constituciones, para seguirse quedando en el poder para lucrar”; y, para ese fin, es necesario silenciar a la prensa.

El Latinobarómetro muestra que se prefiere a los gobiernos de “mano dura”. Entre el 6 % y 20 % de encuestados cree que un régimen autoritario puede ser preferible a uno democrático.

Datos VDS

Entre 2019 y 2020, Voces del Sur ha registrado más de 500 ataques en contra de la libertad de prensa. De esos, cerca de 300 fueron agresiones realizadas por actores estatales.