Brasil, 17 de marzo de 2021 (Abraji). – En la madrugada del 17 de marzo de 2021, en Olímpia, ciudad del norte de São Paulo, fue incendiada la sede del periódico Folha da Região. La policía sospecha que el acto fue una respuesta a la posición del periódico que defendía las medidas científicas y legales para hacer frente a la pandemia.
El caso está siendo investigado por la comisaría de la localidad turística de Olimpia, a unos 400 km de São Paulo. Al sitio web UOL, el delegado Marcelo Pupo de Paula dijo que las cámaras de seguridad de una tienda cercana al periódico captaron el momento en que un motociclista aparcó, arrojó el combustible y prendió fuego a la casa, donde también vive el propietario del medio, el periodista José Antonio Arantes.
«Está claro que la persona lanza un líquido por debajo de la puerta, le prende fuego y luego huye. Hay fuertes indicios de que se trata de un delito, pero todavía estamos trabajando para tratar de identificar a este motorista», dijo el delegado a UOL.
Cerca de las 4:30 de la madrugada, Arantes, su mujer y su nieta se despertaron con los ladridos de los perros de la familia y se dieron cuenta de que estaban siendo asfixiados por el humo. Aunque se encontraron con llamas muy altas, el padre y la nieta se salvaron sin lesiones. La esposa de Arantes sufrió quemaduras leves en un brazo al intentar salvar objetos de su casa.
Además de ubicar la redacción del periódico más antiguo de la ciudad, y el único que circula en papel, en la sede funcionan el portal IFolha y una radio comunitaria del mismo grupo. Arantes presenta un programa centrado en las noticias locales, de lunes a viernes, emitido en Facebook, YouTube y también en Radio Cidade.
Desde que publicó artículos condenando el comportamiento negacionista del presidente Jair Bolsonaro y sus aliados sobre el Covid-19, el periodista dice haber sido víctima de intimidaciones y amenazas.
El 12.Mar.2021, un coche del periódico Folha da Região, que llevaba las ediciones impresas a una ciudad cercana, comenzó a ser seguido en una carretera. El hombre llegó a amenazar con aparcar en el lateral del vehículo. «Pensé que era una broma de mal gusto. Después descubrimos que el coche del periódico amaneció con una rueda pinchada y los tornillos de las cuatro ruedas se habían aflojado».
«Llevo 40 años en la profesión, empecé mi carrera ya al final de la dictadura y no dejaré de luchar por mi pueblo y contra cualquier tipo de terrorismo y pensamiento político que pretenda quitar la libertad y suprimir los derechos de mi pueblo. No quiero morir en el fuego de la inquisición, sino en el fuego del odio».
Abraji enviará cartas a las autoridades pidiendo que se acelere la investigación. No hay información sobre la detención o los daños causados por el incendio en la sede del periódico y en la casa del periodista.