Brasília, 2 de junio (Abraji).
El lunes, 01.Jun.2020, el reportero Igor Gadelha, de la revista Crusoé, fue amenazado por el Ministro de la Oficina de Seguridad Institucional (GSI), General Augusto Heleno, para ser demandado por la Abogacía General de la Unión (AGU). El ministro también dijo que el reportero debería ser incluido en la llamada «investigación de noticias falsas», llevada a cabo en la Corte Suprema por el ministro Alexandre de Moraes.
El periodista buscó a Augusto Heleno para un mensaje de Whatsapp que reflejara las declaraciones hechas por altos funcionarios del gobierno, incluidos los ministros de Estado. Según estas fuentes, el jefe del GSI de la Presidencia de la República estaría inflamando al Presidente Jair Bolsonaro contra la Corte Suprema.
La reacción a las preguntas del reportero fue virulenta. «Debería ser incluido en la investigación de las noticias falsas. ¿Quién fue el mentiroso que le transmitió esas barbaridades? Dime quiénes son los ministros y consejeros. No seas frívola. Eso no es protección de la fuente. Es un chisme irresponsable. Si publicas esto, le pediré a AGU que presente una demanda judicial contra usted», escribió el general.
Igor Gadelha preguntó entonces al general sobre el intento de intimidación y obtuvo esta respuesta: «No le hice ninguna amenaza. Le advierto que trataré de usar los medios legales disponibles para tratar con las calumnias injustificables. No para asustarte. He reaccionado, indignado, por la gravedad de tales mentiras, en la profundidad de la crisis que estamos viviendo».
Para Abraji, es serio acercarse a un periodista de esta manera que sólo cumple con la rutina básica de la investigación. Igor Gadelha trató de escuchar a una autoridad sobre la información entre bastidores que la involucraba y no llegó a ninguna conclusión.
El ministro del Gabinete de Seguridad Institucional comete tres errores: presiona al periodista para que rompa el secreto de la fuente, lo cual está garantizado por la Constitución (Art. 5, XIV); amenaza con demandarlo; y no es tímido a la hora de utilizar la maquinaria pública (AGU) para intimidarlo.
Un país en el que la prensa sufre diariamente la intimidación de los funcionarios públicos corre el riesgo de provocar la autocensura de los periodistas. Por lo tanto, Abraji pide a las autoridades que señalen un cambio de comportamiento y que dejen de recurrir a expediciones autoritarias.
En 2019, Abraji ya se había manifestado contra una orden judicial que censuraba a Crusoe. En ese momento, una decisión del ministro del STF, Alexandre Moraes, ordenó que se retirara el aire del contenido relacionado con un informe sobre las supuestas relaciones entre el presidente del Tribunal Supremo, Antonio Dias Toffoli, y la empresa contratista Odebrecht.